La madre dejó desatendida durante toda una noche a su hija enferma | La encontró a la mañana siguiente ya sin vida
Chanelle, una niña de solo tres meses, falleció tras una larga agonía al estar durante toda una noche desarropada, con frío y enferma en la planta inferior a la que se encontraba su madre manteniendo relaciones sexuales en evidente estado de embriaguez.
Yvonne Adkins -así se llama la madre- se enfrenta ahora a la justicia, que tendrá que ser la que determine si el papel que jugó la madre fue determinante en el fatal desenlace.
Según publica 'Daily Mail', la niña fue encontrada muerta por los forenses estando desarropada y con solo un chándal como vestimenta. Había mostrado síntomas de enfermedad al padecer vómitos durante todo el día aunque estos no fueran suficientes para que la madre le prestara una atención que podría haberle salvado la vida.
Adkins aseguró en un principio que estuvo acompañando a la niña en todo momento, pero posteriormente se derrumbó y reconoció haber estado en la planta superior de la vivienda manteniendo relaciones sexuales y consumiendo bebidas alcohólicas hasta altas horas de la madrugada.
La madre encontró a la niña a la mañana siguiente ya sin respiración y sin que se pudiera hacer nada por su vida. La autopsia determina que la bebé sufrió una "muerte repentina e inesperada", por lo que será la justicia la que tenga que valorar si la omisión de la madre fue o no determinante en el desenlace.
Fuente: ideal.es
Fuente: ideal.es