De una patada en la espalda la arrojó hacia la cama y al caer se golpeó la cabeza contra el suelo | Luego le dio en la cara con la mano y le propinó más patadas en diferentes partes del cuerpo hasta que dejó de llorar, para irse a dormir de nuevo
Conmoción en México por el asesinato cometido por un hombre de 22 años de edad, quien asesinó a su hija de un año y diez meses a patadas, porque no lo dejaba dormir. Así lo reflejan varios medios del país azteca, como El Diario.mx.
Los hechos ocurrieron en la casa de la familia en el estado de San Luis Potosí, cuando el hombre, identificado como Luis Ángel Hernández Almendárez, se despertó debido a los llantos de la pequeña y empezó a lanzarle patadas.
Tras personarse en su domicilio, agentes de la Policía Ministerial detuvieron al padre y lo pusieron a disposición del agente del Ministerio Público, acusado de homicidio.
La madre también ha sido detenida por el presunto delito de omisión de socorro, ya que ella sabía de la violencia física de la que era víctima su hija y nunca denunció los hechos
Por su parte, el padre, al ser detenido, confesó que llegó del trabajo en la Zona Industrial aproximadamente a las 08:00 horas y a las 12:00 se despertó para comer en compañía de su hija. Cuando terminió se dirigió a su cuarto para volver a dormir.
Fue más tarde, en un determinado momento, cuando la menor comenzó a llorar, lo que causó la barbabrie cometida por el padre: de una patada en la espalda la arrojó hacia la cama y al caer, la niña se golpeó la cabeza contra el suelo.
No quedó ahí la brutal agresión: luego el padre le golpeó en la cara con la mano y le propinó más patadas en diferentes partes del cuerpo hasta que dejó de llorar. Sin preocuparle lo más mínimo, se fue a dormir nuevamente.
La menor de nombre Ximena, de un año y 10 meses de edad, llegó sin signos vitales a la Clínica 45, del IMMS ubicada en Salvador Nava en la colonia Central.
Confesó que no era la primera vez que golpeaba a su hija, pero que “nunca había pasado nada”
La pequeña fue trasladada por sus padres a la clínica, el padre argumentó que la menor se había ahogado mientras comía.
Además, la Policía Ministerial del Estado también arrestó a la madre, identificada como Eustorgia N. de 23 años, por el presunto delito de omisión de socorro, ya que ella sabía de la violencia física de la que era víctima su hija y nunca denunció los hechos que sucedían en su propia casa. Por si fuera poco, el padre de la niña confesó que no era la primera vez que golpeaba a su hija, pero que “nunca había pasado nada”.
Fuente: ideal.es