A pesar de que los médicos le han advertido que puede ser peligroso para su salud, esta mujer estadounidense tiene intención de seguir pasando por el quirófano hasta que logre la apariencia que desea.
Foto: Katella Dash se cambió de sexo a los 23 años. Foto: telecinco |
Katella Dash, una mujer estadounidense de 38 años, se ha llegado a gastar 100.000 dólares en operaciones de cirugía estética para parecerse a una muñeca.
Nació siendo un hombre pero a los 23 años pasó por primera vez por el quirófano para cambiarse de sexo. Desde entonces ha pasado hasta en siete ocasiones por el quirófano para hacerse varios aumentos de pecho, retocarse el mentón, los pómulos, los labios...
Dash ha asegurado para el diario 'The Mirror' que cree que está obsesionada con la cirugía plástica, pero que es "algo normal" para ella.
A pesar de los innumerables cambios físicos a los que se ha sometido ya, quiere seguir haciéndose operaciones. Los médicos se lo desaconsejan y sus amigos están bastante preocupados por su salud y creen que no es consciente de los riesgos que conlleva.
Pero Katella Dash dice que quiere lograr una apariencia extremadamente femenina. Por el momento quiere volver a aumentarse el pecho, lo que los médicos consideran muy peligrosos. Según ha explicado un cirujano plástico, "unos implantes más grandes pueden perjudicar a su espalda y a su cuello por el peso".
Katella no es la única que hace este tipo de cosas. Hace unas semanas conocimos el caso de Blondie Benett, que hasta el momento se ha gastado 25.000 dólares en operaciones de estética.