Las muertes de motoristas se duplican

  • Tráfico inicia una campaña de vigilancia intensiva para atajar el incremento de accidentes mortales























La carretera CV-515 que discurre entre Sueca y Albalat de la Ribera se cobraba el martes pasado la vida de un motorista. Al parecer, se salió de la calzada y se estrelló contra el quitamiedos, lo que le produjo la muerte de forma instantánea. Otro trágico fallecimiento que se suma a las once vidas perdidas en lo que llevamos de año, el doble que en el mismo periodo del pasado ejercicio y muy cerca ya de los quince motoristas que fallecieron en las carreteras de la Comunitat durante todo el ejercicio 2014.
Este alarmante incremento de muertes sobre dos ruedas en sólo un año ha llevado a la Dirección General de Tráfico (DGT) a programar una intensa campaña de vigilancia y control de motocicletas en las carreteras de toda la Comunitat.
Los controles se centrarán, sobre todo, en disuadir a los motoristas de realizar maniobras arriesgadas y adelantamientos antirreglamentarios, aunque también se vigilará que lleven sus vehículos en condiciones adecuadas para circular o, concretamente, con la inspección técnica superada. Los excesos de velocidad y no utilizar el casco son otros de los aspectos que van a perseguir los agentes de Tráfico, así como desarrollar una serie de controles de alcohol y drogas para detectar a motoristas que circulen bajo sus efectos. Revisar la documentación de los vehículos y que éstos cumplan con las especificaciones legales será otro de los cometidos.

Sobre ello, el nuevo delegado del Gobierno en la Comunitat, Juan Carlos Valderrama, apuntó que, a pesar de que la mayoría de los usuarios de motocicletas y ciclomotores hacen uso del casco, "todavía existe un pequeño número de motoristas que no lo utilizan", por lo que insistió en la importancia de la concienciación y sensibilización. "Usar el casco no es una opción, es una necesidad", sentenció. El portavoz del Ejecutivo en la región añadió que, según las informaciones que manejan los técnicos, "la casi totalidad de los accidentes de moto son evitables, por lo que se debe buscar todavía más la concienciación de los usuarios con objetivo de obtener mejores resultados" y así reducir la cantidad de siniestros mortales. Pero no sólo es necesario extremar las precauciones en vías interurbanas. Las calles de las poblaciones se están convirtiendo también en trampas mortales para los motociclistas. El pasado día 6, un joven de 15 años fallecía en la localidad de Benaguasil precisamente tras sufrir un accidente con la moto que conducía. Diez días antes, este vez en el municipio de Aldaia, otro motorista perdía la vida tras colisionar contra un turismo. El riesgo al que se enfrentan los amantes de las dos ruedas, sin embargo, no ha servido para frenar la pasión por las motocicletas que existe en la Comunitat. De hecho, en sólo diez años, el número de vehículos de dos ruedas se ha disparado en la autonomía desde las 220.000 censadas en 2005 a las más de 330.000 de la actualidad. Destaca también el ritmo de nuevos permisos para conducir motocicletas que expide Tráfico, y que en la Comunitat supera, de media, los 130 mensuales, y todo ello sin contar las más de 320 licencias para ciclomotores y las cerca de 650 autorizaciones, también mensuales, que se conceden a titulares de otros permisos. Asimismo, según cálculos del sector, cada domingo más de mil motos recorren la provincia de Valencia y, entre dos y tres mil, como mínimo, hacen lo propio por los viales de la Comunitat. Carreteras como las de Agres o Bocairent y, sobre todo, la de Dos Aguas «que es poco menos que un bautismo», son las más concurridas. Pero si una cosa preocupa sobre todas las demás a los motoristas son los guardarraíles. Eliminarlos de las carreteras ha sido, y sigue siendo, la máxima exigencia de los motoristas, que sufren amputaciones, graves lesiones e incluso la muerte al chocar, tras una caída, contra los también conocidos como quitamiedos o «quitavidas» como han sido rebautizados por el colectivo.

Fuente: lasprovincias.es